El SAT participa en encuentro con Viceministro venezolano de trabajo

El área jurídica del SAT de Sevilla mantuvo un encuentro sindical con otras organizaciones en Madrid convocado por el Viceministro de Trabajo del Poder Popular venezolano, Elio Colmenares, aprovechando la visita del político latinoamericano a Europa por una importante reunión en la Organización Internacional del Trabajo (OIT), con sede en Ginebra (Suiza). También estuvieron presentes Yubris Cadenas, Directora General de Relaciones Colectivas y Mario Isea, embajador de Venezuela en el Estado Español. Elio Colmenares debe comparecer en los próximos días ante la OIT por la denuncia patronal debido a la detención de 15 empresarios en su país. Actualmente, Venezuela no tiene en la cárcel a ningún sindicalista y sí a empresarios, lo que ocasiona que sea el único Estado que recibe esta clase de denuncias patronales ante la OIT.

Durante su intervención inicial, el Viceministro ha declarado que «Venezuela está soportando la guerra económica declarada por los opositores y apoyada por el Gobierno de EE.UU. que la ha llegado a declarar como ‘amenaza para la seguridad'». Dentro del ámbito laboral, Elio Colmenares ofreció diversos datos en materia sociolaboral sobre los que mantienen sus actuales líneas de trabajo, dando importancia al cambio profundo en el Sistema de Seguridad Social venezolano donde ante un proceso de privatización iniciado previamente, modificaron la hoja de ruta estableciéndola como «un sistema público, solidario y gratuito» en la Constitución Bolivariana. «De los 25 millones de habitantes, hay 2,7 millones de pensionistas y el objetivo establecido es alcanzar los 3,2 millones. La edad de jubilación es de 55 años para las mujeres y 60 años para los hombres. Las prestaciones importan 14 mensualidades del SMI (12 al mes y 2 extras juntas en Navidad), además de ¼ del SMI en productos de alimentación denominada ‘cesta básica'». Del mismo modo, han establecido una Misión especial contra los núcleos de pobreza crítica, que ha descendido a un 5% de la población, principalmente en localizado en algunas zonas rurales. Las declaraciones del Viceministro tocaron todos los palos posibles dentro de sus competencias, especialmente en el control de la producción y la distribución del país. Según manifestó, «actuamos por una doble vía, una con las empresas en manos de la clase obrera donde la cogestión pública y privada genera empresas mixtas con propiedad social y, por otro lado, el control público de la producción y la distribución privada. Ante la consulta de las Empresas de Trabajo Temporal (ETT), aseguró que en Venezuela están prohibidas, «atacamos así el fraude y las ficciones que suponen pauperización y desregulación» procurando evitar el «outsourcing» (externalización de servicios) y que existan trabajadores de primera y de segunda.

Tras una charla distendida sobre la situación socioeconómica, el Viceministro bolivariano detalló cómo Venezuela aplica, tras su estudio, un modelo «contrario» al del FMI, generando exportación no sólo a EEUU sino también a China, Irán y países de América Latina y el Caribe, enfatizando en carencias básicas como por ejemplo el trigo, cereal que en Venezuela no se produce y es necesaria su exportación la cual ha sufrido una importante variación de precios durante los últimos meses. Ante la consulta de cómo actúan, el Viceministro fue tajante, «mayor planificación económica».

Preguntado por temas organizativos sindicales, Elio resumió el mapa actual del movimiento, caracterizado por el desplome de la Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV, opositora) tras la derrota del paro petrolero de 2002 y el ascenso de la Unión Nacional de Trabajadores (UNT) y la Central Bolivariana. Actualmente, la UNT tiene una presencia testimonial y la Central Bolivariana ostenta la representación del 76% de la clase trabajadora sindicada. Entre sus últimas propuestas destaca la creación de milicias obreras contra la guerra económica. Además, hace énfasis en que existe un 20% del movimiento sindical no federado.

Finalmente se comenta la política de vivienda, reflexionando que un derecho no es tal cuando no resulta efectivo. Contrasta la política del gobierno venezolano, que desde la Misión Vivienda ha entregado en los últimos años 700.000 viviendas, frente a la situación del Estado español, caracterizada por 500.000 desahucios. No existe posibilidad de desahucio porque la cuota hipotecaria es fija y por tanto no se dan.

La valoración del encuentro ha sido muy positiva, tomando notas de la realidad venezolana tan mediática en los periódicos españoles que apuestan, claramente, por la oposición acusada de estar financiada por EEUU para desestabilizar al país y al proceso bolivariano que ha sacado de la pobreza a millones de personas.